Desde mi ventana, mientras el color palidece el frío me abraza. Los recuerdos como sonajero de hojas que vuelan, giran en el más ducle pensamiento. La soledad se vuelve cálida y grita tu nombre en el silencio. Esperando tu abrazo en la penumbra.
Nos salvaremos en el otoño.
No hay comentarios:
Publicar un comentario